Quiero pasarles un fragmento de publicación que me pareció Buena Dice:
Cuando te sientes infeliz con tu cuerpo, verte al espejo puede ser una pesadilla…
Una experiencia dolorosa que hace que digas “¡basta!”…
Que te prometas a ti mismo que vas a cambiar tu vida.
Y estoy segura de que así lo quieres, pero decirlo y hacerlo son dos cosas completamente distintas.
Dime si esto que estoy diciendo no te parece conocido…
Te propones tus metas… y te dices a ti mismo que vas a perder peso.
Empiezas a comer menos… a lo mejor hasta empiezas a ir al gimnasio…
Y todo va bien.
El peso comienza a bajar.
Pero pronto… a lo mejor en una semana… a lo mejor en dos… te encuentras en el medio de una tentación, de un momento de debilidad.
Y comienzas a sentir antojos…
Son tolerables al principio, pero eso pronto se escapa de tus manos… y se hacen insoportables…
Tu cuerpo te pide a gritos que le des azúcar…
Y a pesar de que estás luchando contra ti mismo, es solo cuestión de tiempo para que caigas en la tentación…
“Me he estado portando bien. Un dulcito no me hará daño.”
Pero una vez que le das una probadita, esos antojos se esparcirán como el fuego…
Esa pequeña cucharadita de helado que te ibas a comer… te llevo a comerte la mitad del pote.
De repente, un paquete completo de Oreos, desaparece…
Sientes que te fallaste… y tu motivación cae por completo.
Todo porque ……….. puedes terminar de leer este articulo en este blog:
http://reducir-peso-quemando-gozando.blogspot.com/Espero les sirva mucho.