Las 7 Leyes Herméticas en “LA CUARTA DIMENSIÓN”

1 - Ley de MENTALISMO:

“Todo es mente, el universo es mental”.

Podemos concluir, sin equívocos, que el Universo es espacio y orden, desarrollo ordenado, es decir: la expansión universal es el ordenamiento del espacio hasta su perfección final.

(Cap. I “El Universo”, Pág. 4)

La voluntad es el poder sobre la materia, que es espacio, que es energía.
La energía universal que es el espacio, se modela con la mente y quien materializa es la voluntad. La Mente proyecta y la Voluntad imprime.

(Cap. V “La Voluntad”, Pág. 44)



2 - Ley de CORRESPONDENCIA:

“Como es arriba es abajo, como es abajo es arriba”.

Si hemos observado que todos los espacios se desarrollan dentro de espacios mayores, podemos concluir que el Universo es un espacio que se origina dentro de un espacio mucho mayor, que es un espacio que tiene más tiempo; igual que al retroceder en el tiempo del feto, el espacio que ocupa se va reduciendo hasta su semilla, y antes de la semilla, sólo había el espacio mayor, que es el vientre materno, un espacio que tiene más tiempo.

(Cap. I “El Universo”, Pág. 8 )

Nuestro propio organismo es una representación del Universo, nuestro cuerpo físico es un universo en miniatura.
El mismo orden que desarrolla el Universo está en nosotros.

(Cap. IX “La Perfección”, Pág. 84)



3 - Ley de POLARIDAD o DUALIDAD:

“Todo es dual, Todo tiene dos polos”.

Al ser ésta una dimensión en la que todo está en desarrollo, es fácil comprender que todo tenga dos extremos, que son desde el principio al fin del desarrollo, de modo que al ejercitar la voluntad, para desarrollar nuestra fuerza, sensibilidad y razón, es inevitable conocer la debilidad, el dolor y la desilusión.

(Cap. V “La Voluntad”, Pág. 46)



4 - Ley de CAUSALIDAD:

“Toda causa tiene su efecto, todo efecto tiene su causa”.

Si uno sufre un accidente o padece deficiencias, mirad que es por su bien, porque no hay casualidad, sino estricta causalidad. Como se tapa el ojo sano para mejorar la visión del enfermo, así obra el alma sobre el cuerpo, condicionando una parte para forzar el desarrollo de la otra parte.

(Cap. XII “El Anticristo”, Pág. 120)



5 - Ley de VIBRACIÓN:

“Todo vibra, nada descansa”.

El origen del espacio universal, no es una semilla de espacio, sino de orden, de tiempo, de luz.
El espacio es visible, es energía vibrando en el orden de la materia.
El tiempo es invisible, es energía vibrando en el orden de la luz.

(Cap. III “La Tercera Dimensión: El Espacio-Tiempo”, Pág. 22)



6 - Ley de RITMO:

“Todo fluye, dentro y fuera”.

La respiración es nuestra conexión con Dios.
De igual modo moriría todo el Universo, si la Gran Conciencia Universal dejara de respirar.
La respiración es el impulso descodificador de la perfección de la conciencia.
Respirando, nos llenamos y vaciamos, aspirando nos llenamos y espirando nos vaciamos. Aspirando recibimos inspiración, color, idea, saber, poder creador. Espirando damos luz, amor, fuerza, energía creadora.

(Cap. VI “La Respiración”, Págs. 53, 55 y 57)



7 - Ley de GENERACIÓN:

“Todo tiene su género, masculino y femenino”.

Como la energía que desarrolla el espacio, que es el feto, es de la conciencia mayor de la madre y el orden del desarrollo es de la semilla propia del padre, también el Universo tiene Padre y Madre.

(Cap. III “La Tercera Dimensión: El Espacio-Tiempo”, Pág. 24)

Igual que Dios no necesita crear más parejas de seres humanos que la primera, porque da a la pareja el poder de recrear por sí misma su propia perfección en sus hijos, así sucede con toda la Creación Universal.

(Cap. IV “La Naturaleza”, Pág. 33)



NOTA FINAL:

Muchas generaciones de células se suceden, mientras el espacio propio del niño se desarrolla hasta su total perfección. ¿Cómo explicarle a la última generación antes del parto, que su realidad va a cambiar como de la noche al día?

De modo análogo, muchas generaciones de seres humanos se suceden, hasta que el Universo ha ocupado todo su espacio y terminado su tiempo de perfección “su 4ª dimensión”, pero será precisamente esta generación, la más comprometida en la ruina de su propio espacio y en el derroche de su propio tiempo, la generación que vivirá el final de los tiempos. El despertar de la conciencia a la 4ª dimensión. La 4ª dimensión propia, la 4ª dimensión del Universo y la 4ª Dimensión que es la Eternidad de los Cielos. Vamos a pasar de la 3ª Dimensión, el espacio temporal, a la 4ª Dimensión, la Eternidad, que es el camino al Paraíso, la 5ª Dimensión de Dios.

(Cap. III “La Tercera Dimensión: El Espacio-Tiempo”, Pág. 30)